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De todos los cuerpos posibles disponibles cuando entrabas en esta encarnación, tu alma eligió el que ocupas actualmente. Esta fue y sigue siendo una elección amorosa.

Desde una perspectiva Akáshica, tu cuerpo es el vehículo óptimo para encontrar y abrazar la Realidad Divina. Tu cuerpo y su condición son perfectos para los propósitos e intenciones de tu alma en esta vida en particular. Ya sea que tengas el físico de un atleta olímpico o un contenedor de enfermedades, tu cuerpo te está ayudando a manifestar el destino de tu alma.

Sé que cuando me siento saludable y maravilloso, lo entiendo. ¡Oh! Mi cuerpo es el instrumento de mi alma. Pero con algunos dolores y molestias, o un diagnóstico médico aterrador, eso plantea algunas preguntas, ¡y de repente no sé de qué se trata este cuerpo!

Abrámonos a un nuevo nivel de conciencia, compasión y respeto por el yo físico que somos en esta vida. Con tu cuerpo como portavoz de tu alma, ¿qué mensaje tiene tu alma para ti? ¿Por el mundo?